2002-10-16
Calefacción
Hoy me crucé en la calle con un amigo. Hablamos de las cosas ordinarias y luego yo mencioné la poderosa llamada del lado oscuro que sienten quienes practican algunas profesiones, quizá recordando el escrito de anoche. El me dijo que estaba leyendo Rojo y negro de Stendhal. Yo asentí . Caramba, qué envidia. Eso sí que es extraordinario. En este tipo de conversaciones emocionadas sobre las cosas que nos emocionan suelo padecer de cierto sentimiento de inferioridad, y como sabía que mis lecturas no iban a hacerle especialmente feliz no se me ocurrió otra cosa que anotarle en un papelito la dirección de algunos blogs que me gustan. En internet se leen cosas muy interesantes, decía yo mientras dudaba entre calificarme como un simple mentiroso o un vulgar exagerado.
Ahora, al encender el ordenador y abrir la carpeta de favoritos en busca de blogs casi olvidados me he encontrado un montón de enlaces a páginas sobre calefacciones. ¿Vale la pena instalar acumuladores eléctricos en una vivienda unifamiliar? ¿Es mejor el gasoil a pesar de los olores y la incertidumbre del precio? ¿Propano en depósito o en botella? ¿Cuál es la temperatura mínima que alcanza mi pueblo en invierno? ¿Calderas mixtas, calentadores eléctricos de agua, aluminio...? ¿Será rentable la energía solar en este umbrío país? Necesito con urgencia una buena novela que me haga reír y hable del calor y del hogar. ¶
posted by vendell 23:11
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Comentarios
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Ayer me crucé en la calle con un amigo. Hablamos de las cosas ordinarias y luego él mencionó que practicaba no sé qué actividad oscura. Yo le dije que lo mío era la literatura, no me gustan los malentendidos. Pero el asintió con un guiño. Me puse algo rojo, luego negro y él, aprovechando mi turbación momentánea, me facilitó ciertas direcciones de internet que ¡debía visitar! Inmediatamente sentí la punzante sospecha de que algo maligno se estaba fraguando, de que no existen los encuentros casuales. Pero el mal ya estaba hecho. Ahora me veo atrapado en algo turbio, impuro, contracultural, y lo que es peor ¿deberé aun así estar agradecido? ¿me arrepentiré? ¿tendré que hacer penitencia? ¿ayuno? ¿yoga?
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Sorel, Sorel, ese sí que está jugando con el lado oscuro...
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Sepan todos que el anuncio de algo turbio, impuro y contracultural se hizo en el mostrador de una librería a la que entramos a pedir lápiz y papel. Punta gorda, posiblemente B2, boletín de pedido garrapateado y las rodillas hincadas contra el expositor de Vogues y Wallpapers. Las auténticas casualidades no tienen lugar en entornos tan casual. |