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2002-09-25
Tripktk rggg, trpktiktik
Ha llegado el momento de discrepar. Nuestro amigo El Pez y nuestro amigo y casero Rvr han visto la película de los círculos del maíz. Yo también. No quería decir nada porque no me gusta decir algo y que luego nadie esté de acuerdo. Uno no está hecho para ser la minoría. Ya conocen la sensación. Pero discrepar sobre seguro es más agradable.
La película es casi magnífica. Servidor, deportista de elite con 50 pulsaciones en reposo, se pasó dos horas tensado como un arco con el corazón saliéndose por las sienes. Aunque es cierto que algunos trozos se hacen innecesarios (el melodrama moral de Mel, por ejemplo), la historia crece ante los ojos alcanzando momentos que el cine recordará siempre, en especial esa escena iluminada por linternas que ruedan por el suelo. Y eso que las anteriores películas de este director sólo me sorprendieron (la una) y me aburrieron (las dos). También he de reconocer que en ésta hay mucho (¿demasiado?) de Los Gremlins y, sobre todo, de La noche de los muertos vivientes. Además, detesto el recurso dramático de la exploración del dolor y la frustración de quien ha perdido a un ser querido, sobre todo si es un niño. Pero aún así valió la pena. ¶
posted by vendell 23:12
8 Comments
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Comentarios
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1
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| De: rvr |
Fecha: 2002-09-26 03:43 |
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A mi me resulta sorprendente y admirable que con tan pocos elementos y tan pocos efectos (especiales y sonoros) se cree tanta tensión. Es casi una obra de teatro, más que una película. Hay muchos elementos prescindibles, pero en dosis homeopáticas tienen su gracia.
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| De: El Pez |
Fecha: 2002-09-26 08:31 |
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En fin, me descubro ante seres tan llenos de sensibilidad... de la que, por lo que se ve, carezco por completo.
No niego los efectos climáticos, todo lo contrario. Ni que la historia está inteligentemente presentada. ¡Qué menos!
Pero a mi sólo me asustó el ladrido de un par de perros. Y la tensión me la producían unas adolescentes que se dedicaban a temblar (a la vez que aullaban) moviendo agitadamente los brazos. Como tenían en la mano un bolsón de palomitas, el efecto en sí era mucho más aterrador que las caritas de Meloso Gibson.
De veras, debo haber embutido mi corazón en plástico o tener la emoción glasofanada, pero la historia no me provocó tensión alguna. Bueno, algo sí: el corto de presentación con una partitura orquestal excelente y las letras sin más. Excelente (y lo digo sin segundas intenciones...)
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3
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| De: Vendell |
Fecha: 2002-09-26 16:33 |
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Peixe, lo que pasa es que a Vds su ultima salida a Wichita le ha dejado sin presión la pituitaria visual. QWuizá deba empezar otra vez desde cero con Rene Clair y esos...
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4
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| De: El Pez |
Fecha: 2002-09-26 16:50 |
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Snif snif... creo que tiene Vd razón, Vendell. Seré un poco Fausto para vengarme del diablo, me calaré un sombrero de paja para recorrer los tejados de París o, finalmente, me iré con el fantasma al Oeste (al de verdad, no al Medio Oeste donde me quedé la otra vez).
Y cuando salga en deuvedé "Señales", la veré de nuevo, para ver si me pasa algo bajo la hojalata que me cubre... quién sabe.
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5
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| De: Ctugha |
Fecha: 2002-09-29 13:21 |
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Pues tendré que ir a verla... aunque igual no llegue a entrar en el topic "cine malo" de mi blog...
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7
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| De: Vendell |
Fecha: 2002-09-30 17:40 |
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El problema, digo yo, es que los peces no tienen párpados. Es más, como no creo que venga a leerlo aquí (y no por falta de agallas) ahorita mismo se lo pongo en su pecera.
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